El efecto financiero de las microempresas locales en época de pandemia (COVID-19) Article uri icon

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  • Las microempresas son las más afectadas por la pandemia del COVID-19, ya que dependen de sus ingresos del público en general y sus ventas son de contado. Casi no les venden a empresas por lo que no tienen un ingreso seguro. Las mayores actividades de las microempresas tienen relación con la comida. Hay dos impactos importantes que se suscitaron y que afectaron las ventas de manera importante, después de haber declarado la Organización Mundial de la Salud al COVID-19 como una pandemia, el primero de ellos en el mes de julio del año 2020 y el segundo en el primer mes del año 2021 (también llamadas “olas”). Los gobiernos locales oficializaron a las actividades preponderantes como actividades esenciales y no esenciales. Las primeras se realizaban bajo un protocolo de seguridad y a baja escala, por lo que tenían que ajustar sus erogaciones. El desempleo abundo de manera importante, en donde, aún no se recupera totalmente. Las segundas de ellas de plano quebraron o hacían un cambio de actividad para poder sobrevivir. Por parte del gobierno federal no tuvieron un apoyo económico permanente e importante. Sólo era una cantidad única de 25 mil pesos, en algunos casos, cumpliendo con requisitos como el régimen fiscal y que hayan permanecido en la seguridad social los trabajadores en el primer bimestre del año y mantenerlos vigentes. La afectación financiera se suscitaba en la falta de liquidez, solvencia y rentabilidad. La información al primer semestre de 2020 es que habían cerrado más de un millón de establecimientos en todo el país. No es una cantidad menor y si es relevante. También se muestra en la disminución de microempresas en el padrón nacional de contribuyentes, específicamente en el Régimen de Incorporación Fiscal. En donde el punto más alto de inscritos fue hasta marzo del año 2020 y de ahí viene disminuyendo paulatinamente. La información financiera se verá afectada. Al momento en que los dueños tomen decisiones por medio de estados financieros y apliquen la comparabilidad. No será lo mismo comparar los ejercicios 2019 con el 2020 ni éste último con el 2021. Tendrán que reacomodar o ajustar la aplicación de importes del monto depreciable, amortizaciones, cuentas incobrables, generación de intereses a cargo por incumplimientos, ajuste al punto de equilibrio, revisión y ajuste a los inventarios, etc. Adicionado a nuevos esquemas de trabajo (home office), la recontratación y capacitación del personal, entre otros. Se viene un nuevo modelo de operar en las empresas, debiéndose aprovechar las nuevas tecnologías, revisando sus costos y gastos enfrentándolos a sus posibles ingresos.

publication date

  • 2021-01-01